Un sueño extraño

Bueno, tocará contar hoy el sueño que tuve :). Este es de los buenos, sobre todo porque yo todavía tengo las imágenes en la cabeza :D:D.

Estoy en Coruña, entre San Pedro Mezonzo y el Corte Inglés, dirigiéndome a la parada del bus. Entonces me encuentro con Serafín, un profesor de la facultad de informática que ya es mayor (al menos tiene pelo blanco y barba). Empezamos a hablar de tonterías, que si te di clase y cosas así. Tiene un ojo chungo (no sé por qué). A menudo hace chistes graciosos sobre el alcohol, a veces parece que ha bebido y a veces no.

Como tenemos que subir a la facultad decidimos coger un bus. Sin embargo cogemos uno equivocado y empezamos a ir por calles ficticias de Coruña (al menos yo no las conozco). Mientras vamos hablando de trivialidades, voy pensando "A ver si me deja en una parada conocida y subo a la facultad". Entonces Serafín ve a dos personas en la calle, y dice algo como "Ah, ya están listas, tengo prisa. Os dejo en la facultad"

En la siguiente escena Serafín está conduciendo el autobús, y vamos dentro Edu, Ana (Rábade), y yo; no hay nadie más en el bus. Edu va partiéndose. Estamos yendo por una calle muy estrecha, y entonces una grúa (de coches) sale de donde estaba aparcada sin mirar. Serafín intenta frenar, pero no lo consigue, así que se monta en la acera y nos llevamos por delante una parada de autobús. Esto tiene pinta de ser Londres, al menos me lo recuerda. Entonces, muy enfadados, miramos mal para los de la grúa. En el asiento del copiloto un tío que mira para nosotros pasando de todo, conduciendo una tía que parece que no se enteró de nada (y que no se está enterando de nada), y detrás, donde suele ir un coche, un tío de pie, desasfiante, mirándonos mal.

En la siguiente escena estamos ya cerca del campus de Elviña, en una de las calles estrechas que hay entre Elviña y Zapateira. Serafín quiere meter el bus por una calle por la que no cabe, pero lo convencemos de que no lo haga. Finalmente estamos en una explanada de Elviña, con un cobertizo y una empalizada a mano izquierda, cerca del edificio Xoana Capdevile. Ya no estamos en el bus. Por las escaleras sube Álvaro Barreiro, el jefe del laboratorio de la facultad donde estoy (o estaré, espero). Para llamar su atención, Serafín le tira una pelota, que va botando; pero Álvaro está despistado y la pelota lo va a golpear en la cara. Afortunadamente alguien para la pelota, nos juntamos todos y comenzamos a hablar de cosas intrascendentales. Aparecen también Roi, Parapar y otro tío; van a dar clase de algo, y cada uno quiere dar una cosa diferente, así que están echando a suertes lo que van a dar.

En la siguiente escena necesitamos algo de dentro de la empalizada. Así que abrimos la puerta y vemos que está llena de heavys (barbas, melenas...), todos mirando para nosotros pero sin aparentar ser agresivos. Hasta está el cantante de Metallica. Todos van vestidos con faldas escocesas rojas, camisetas blancas, y llevan en los pies movidas de piel como las que llevaba Conan (sólo que en rojo, será que van conjuntados). Cuando estamos pensando si entrar, aparece Patxi (un colega alto, delgado, pelo largo, tatuajes y que siempre lleva camisetas negras de grupos míticos). "Tranquilos, ya voy yo" dice. Nos damos cuenta de que va vestido como ellos :D. Entonces entra en el recinto corriendo, en posición agazapada, medio de lado y apoyando las manos en el suelo :D, y da una voltereta (esto último en plan Camilo).

Se queda tumbado en el suelo y decidimos que se ha hecho daño. Ana se ofrece a ir a pillarlo, pero como los tíos heavys con faldas no nos inspiran confianza, voy yo. Recojo a Patxi.




Aquí me desperté, y empecé a reirme.